Para la higiene diaria corporal y capilar.
Evitar el contacto directo con los ojos.
Moja tus manos con agua y frota la pastilla de jabón sobre el cuerpo o una esponja hasta que haga un poco de espuma. Lavate como de costumbre. Aclarar después con abundante agua.
Son jabones sobresaturados con aceites, por lo que además de limpiar, aportan una hidratación extra. De todas formas, un jabón no está pensado para hidratar, sino para limpiar. Después de la limpieza con un jabón, por muy natural que sea, es recomendable el uso de una crema o aceite hidratante y nutritivo.
Si lo usas en el cabello, al principio, es probable percibir una sensación de aspereza o poco brillo, debido a la saturación de residuos que han dejado sobre el cabello los champús convencionales. Sin embargo, al cabo del tiempo, el pelo adquiere más soltura, brillo y suavidad.
Los jabones sólidos son los más naturales y ecológicos del mercado. ¿Por qué?
Porque se presentan en formato sólido, en pastilla: no hay agua, no es jabón diluido, en una pastilla de 120 ml. hay los mismos usos que en un formato de botella de plástico de 750 ml., pero sin botella de plástico. Así se reduce el impacto ambiental del embalaje del producto.
Porque están elaborados sólo con ingredientes puros: aceite de oliva virgen extra, aceite de coco virgen, extracto de romero silvestre y aceites esenciales. Todos certificados bio. No contienen aceite de palma.