Una simple lectura a veces puede transformarte y cambiarlo todo. Para Annick Goutal, fueron las Memorias de Adriano de Marguerite Yourcenar, un verano en Italia. Más que un recuerdo, es un paisaje que toma forma bajo el sol de la Toscana, en una terraza bordeada de cipreses; es un cóctel de limón y cítricos chispeantes, una fragancia de deslumbrante frescura, con una elegancia discreta e increíblemente moderna es la primera fragancia de la Maison, la atemporal Eau d'Hadrien. Nota de cabeza:
Limón siciliano, cidra, pomelo, bergamota Nota de corazón:
Mandarina verde de Italia, bayas de enebro Nota de base:
Ciprés, ylang ylang, almizcle.