La Quercetina fue descubierta por J. Rigaud en el año 1854. Es un pigmento natural hidrosoluble que se encuentra en alimentos vegetales. Es el flavonoide más abundante y el más habitual en la alimentación humana, destacándose por su elevada actividad antioxidante. Muchas plantas, ya sean consideradas medicinales o no, deben gran parte de sus beneficios a los altos niveles de quercetina que presentan. Por ejemplo, algunas clases de cebolla como la roja contienen tanta quercetina que el compuesto representa el 10% de su densidad en seco. Se ha demostrado en estudios experimentales que tiene numerosos efectos en el cuerpo, incluyendo la inhibición tanto de la producción como la liberación de histamina, siendo especialmente más conocida por su acción antioxidante. Existen estudios recientes que demuestran su contribución para el bienestar cardiovascular. La Quercetina se encuentra en muchas frutas. En el Reino Unido son también las manzanas (además de las cebollas) las que, a través de la dieta, la aportan en mayor cantidad. Cada tableta de 500 mg proporciona una cantidad de Quercetina significativamente superior a 1 kg de manzanas.
• Potente antioxidante.
• Puede ayudar a mantener el bienestar cardiovascular.